Prepárate que vienen curvas.

Cuando piensas que todo esta bien, cuando ya está superado, cuando ya estás preparada para lo siguiente, entonces toma, la vida te da otro palo. Y así es como te das cuenta de las cosas, de que ni todo lo bueno es tan bueno ni todo lo malo es tan malo. Y de que si las cosas van mal, no agaches la cabeza y seas fuerte porque puede que las cosas que vengan sean peores. A lo mejor esto solo lo piensas cuando estás desde el punto de vista negativo, y cuando estás desde el punto de vista positivo piensas que, si las cosas van mal, bueno, ya irán a mejor. Y es verdad, es así, pero hay veces que ya no te quedan ganas, o fuerzas o directamente es que no quieres seguir luchando. Pero vida solo hay una, y no quiero desaprovecharla, por muy puta que sea y difícil que me ponga las cosas, yo sé que tengo las armas suficientes para poder salir adelante y enfrentarme a ella, y que todos podemos superar los obstáculos que nos ponga. Pero en estos momentos, estoy en los puntos más bajos y piensas todo lo contrario. Vida, cuando te pregunté si las cosas podían ir a peor, era una pregunta retórica, no un reto.

Y ya no está, y entonces simplemente querrías no estar tú, desaparecer, sin demasiados problemas, sin tener que dar explicaciones a nadie.

Estoy fuera de los recuerdos, del pasado, pero también estoy perdida, antes o después las cosas que has dejado atrás te alcanzarán.

A veces es mejor estar solo.

Te despiertas, triste, no es uno de tus mejores días y piensas que lo único que quieres es desaparecer, pero todo lo que realmente quieres, es que te encuentren.

Déjame presentarme, déjame ser como realmente soy, déjame conocerte. Te pido algo así de sencillo, que no me hagas esconder lo que realmente siento.

Sabemos que nada dura para siempre, que todo tiene fecha de caducidad, y te hace plantearte demasiadas cosas. Si todo ese tiempo realmente le has importado algo.

Y otra vez, otra vez como todos los días, ocurre la misma historia, he intentado escapar hacia el mismo lugar.

No caigas, lucha.

En esta vida no se llega a la meta de cualquier manera. Solo se llega luchando, y solo uno sabe lo que el mismo ha hecho. 

Para llegar allí tienes que caer, y tienes que aprender a levantarte. 

De los errores se aprende.

Pero todo tiene un camino, y cada camino tiene un principio y un final. Las cosas no se consiguen solas, todo tiene su proceso, y no es fácil. Cada cosa tiene su dificultad. Los errores no hay que esquivarlos, hay que pasar por encima de ellos, pisarlos, LUCHAR contra ellos y ganarles. Y al final de todo esto, todo tiene su recompensa.
Las cosas vienen por si solas. Y la vida en algún momento te lo devolverá.